La catalana Grifols continúa con su plan de expansión internacional, la última adquisición ha sido la unidad de diagnóstico transfusional por tecnología de amplificación de ácidos nucleicos, hasta entonces en poder de Hologic. Grifols no ha dudado en aumentar su deuda para hacerse con ella, una adquisición que se cerró por un montante de 1,575 millones de euros (1.850 millones de dólares). La operación incrementa moderadamente el nivel de endeudamiento de Grifols, que alcanza los 3.809,2 millones de euros, un montante que incluye 900,5 millones de euros en caja.
El acuerdo articulado a través de la filial americana de Grifols también contempla la adquisición de la planta de San Diego en California, así como los derechos de desarrollo, licencias sobre patentes y acceso a los fabricantes de producto. Asimismo, Grifols incorporará a los profesionales de esta área de actividad a su plantilla, que se incrementará en 175 personas.
Volviendo a la operación, el cierre de la adquisición de la unidad de diagnóstico ha suscrito un préstamo de 1.614 millones de euros (1.700 millones de dólares) con Nomura, que se prevé para el primer trimestre de 2017 y que requerirá del visto bueno de las autoridades regulatorias.
Grifols potencia su posición en el área de medicina trasfusional
Con esta compra, Grifols pasará a gestionar íntegramente la comercialización de esta línea de negocio centrado en la investigación, desarrollo y producción de reactivos e instrumentos basados en tecnología de amplificación de ácidos nucléicos para diagnóstico trasfusional y de trasplantes. Esta tecnología permite detectar la presencia de agentes infecciosos en las donaciones de sangre y plasma, contribuyendo a una mayor seguridad en el diagnóstico trasfusional. Cabe destacar que la compra de la unidad de diagnóstico corresponde a la estrategia de la multinacional catalana de consolidación y crecimiento prevista para la División Diagnostic que le permitirá reforzar su posición en el segmento de la medicina trasfusional.