La farmacéutica francesa Servier ha firmado una alianza con la biotecnológica alemana Pieris Pharmaceuticals para trabajar conjuntamente en el desarrollo de cinco programas terapéuticos biespecíficos relacionados con la inmunoncología. Los cinco estarán basados en el inhibidor de checkpoint PRS-332 de Pieris.
Ambas compañías se han repartido geográficamente los derechos comerciales de los resultados que obtengan de este trabajo conjunto: la germana conservará los derechos comerciales en Estados Unidos y la big pharma dispondrá de ellos en el resto del mundo.
El acuerdo también define cuatro posibles programas adicionales (de los que sólo se llevarían a cabo tres) en los que se combinarían anticuerpos de la cartera de productos de Servier con la plataforma tecnológica Anticalin, una marca registrada de Pieris que engloba una serie de proteínas terapéuticas validadas en la práctica médica.
La alemana tiene la opción de desarrollar conjuntamente y conservar los derechos comerciales en Estados Unidos de hasta tres programas, mientras que la francesa será responsable del desarrollo y la comercialización de los otro cuatro programas en el resto del mundo.
Objetivos de futuro
Con esta rúbrica, Pieris consigue con ello el respaldo económico de una big pharma, determinante para su desarrollo corporativo y para ampliar su cartera de productos, sin perder los derechos en el principal mercado oncológico. Por su parte, Servier aumenta su cartera de inmunoncología con el objetivo de convertirse en uno de los principales proveedores en el tratamiento del cáncer.
En estos momentos, la multinacional cuenta con cinco productos en desarrollo temprano o preclínico tardío en este campo, a los que se sumarán los que obtenga de su trabajo con Pieris. Además, la francesa también tiene entre manos fármacos para enfermedades cardiovasculares, inmunoinflamatorias y neurodegenerativas, y para la diabetes.