La farmacéutica alemana continúa con su intención de desprenderse completamente de Covestro para centrarse en el negocio de las ciencias biológicas.
Sanitia. Bayer ha vuelto a reducir su participación en Covestro, su fabricante de materiales de altas prestaciones y de sistemas innovadores, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), lo que supone un paso más hacia la separación total entre ambas compañías. Y es que la farmacéutica quiere centrar su negocio exclusivamente en las ciencias biológicas, por lo que necesita liquidez para financiar la deuda adquirida por la compra del productor de transgénicos estadounidense Monsanto. La compañía alemana ya vendió a finales de febrero el 10,9% de su participación en esta firma, pasando del 64,2% al 53,3%. Con esta nueva reducción se queda con el 40,8%, aunque seguirá manteniendo una participación mayoritaria.
La compañía farmacéutica ha anunciado a la CNMV que va a depositar 8 millones de acciones de Covestro en el fondo de pensiones Bayer Pension Trust, lo que supone un 4% de su participación en el fabricante (unos 530 millones de euros). Asimismo, se ha desprendido del 8,5% restante con la venta de 17,25 millones de acciones a 62,25 euros cada una, a través de un procedimiento de colocación acelerada en el mercado abierto. También ha ofrecido títulos de deuda por 1.000 millones de euros con vencimiento en el 2020, que se podrán convertir en acciones de Covestro. Unos títulos de deuda que tendrán un interés anual del 0,05 %. Estas operaciones han ido dirigidas exclusivamente a inversores institucionales.
En septiembre del año pasado Bayer acordó comprar Monsanto por cerca de 59.000 millones de euros (66.000 millones de dólares), por lo que necesita mucha liquidez para hacer frente a la deuda adquirida tras la adquisición, que previsiblemente se realizará antes de final de año. Johannes Dietsch, director financiero de la farmacéutica, ya anunció a finales de febrero, en la presentación de resultados de la compañía, que la intención era desprenderse de sus participaciones en Covestro, un punto importante para la alemana, que obtendrá así parte de los ingresos que necesita para convertirse en el mayor gigante agroquímico del mundo.